Don Aga, fundador y alma de nuestra historia Armando Gutiérrez Acevedo, conocido por todos como Don Aga, fue el visionario que encendió la chispa fundacional de nuestra historia. A los 22 años, lideró la creación de la primera fábrica de carrocerías metálicas para buses en Duitama, dando origen a Autocol y a las emblemáticas carrocerías Muisca. Su empuje, liderazgo y vocación por el desarrollo colectivo marcaron más de cinco décadas de industria, transformación y esperanza. Hijo de campesinos y con formación empírica, Don Aga fue un autodidacta apasionado por la lectura, la política y la economía. Fundador de la Cooperativa Industrial de Boyacá y promotor incansable de la Ciudadela Industrial de Duitama, sembró tejido empresarial donde antes solo había utopía. En 1977, tras retirarse de Autocol, fundó Autobuses AGA de Colombia, empresa insignia de la industria carrocera nacional, con la que enfrentó y superó múltiples crisis, incluida una liquidación revertida gracias a su tenacidad y a un modelo basado en la autogestión y la confianza mutua. Su liderazgo humano se reflejaba en su cotidianidad: “el peor sitio para ver el mundo es el escritorio”, decía, y por eso dedicaba el 80% de su tiempo a compartir con su equipo en la planta. Su modelo se sustentó en el consejo, no en la orden; en el compromiso, no en la imposición. En 2015 fue condecorado por el Senado de la República por su trayectoria empresarial. Don Aga falleció el 10 de abril de 2023, pero su legado vive en cada carrocería, en cada conversación y en cada persona que, como él, cree que hacer empresa es una forma de servir. En AGA seguimos rodando con su ejemplo.